Al principio, tenía miedo, estaba petrificada.
Seguía pensando que nunca podría vivir sin ti a mi lado.
Pero luego, pasé tantas noches solamente pensando en cómo me habías herido.
Y me volví fuerte.

I Will Survive
 – Gloria Gaynor

La capacidad que tenemos de enfrentar situaciones complicadas se llama resiliencia, en psicología. Define estas actitudes y acciones que encontramos en el ser humano, cuando su vida cambia de forma brusca. Puede ser un accidente, una enfermedad o la pérdida del puesto de trabajo. En la mayoría de las ocasiones, no sabemos que poseemos esta cualidad ¿qué curioso verdad? Porque parece que sería muy conveniente ser consciente de ella. Y no solo esperar a que llegue cuando vivimos un evento traumático.

Evitar las dificultades es una de las claves que se han asociado a la civilización. Nuestra vida cotidiana se ha desarrollado a lo largo de lo años evitand el dolor. Y esto tiene sus efectos colaterales. Al hacerlo, perdemos la sensación de poder abordar las situaciones complicadas.

Hemos, en cierta forma, externalizado nuestra resiliencia natural. Lo hacemos desde pequeños, protegiendo a nuestros hijos de todo, literalmente todo, lo que les pueda ocurrir. Y no estoy sugiriendo que esto sea intrínsecamente malo. Simplemente, que consigue adormecer esta capacidad y nos convierte en dependientes. En ocasiones emocionales, cuando es de otras personas, o de sustancias que nos recetan o, simplemente de soluciones mágicas sin ningún tipo de fundamento científico.

Explorar nuestra resiliencia es un trabajo propio fascinante. Forma parte de ese viaje interior en que nos descubrimos encontrando secretos íntimos que no conocíamos. Pero, no nos equivoquemos, como todo viaje tiene sus momentos buenos y malos.

Y es ahí donde iremos viendo como funciona nuestra secreta capacidad de resistencia frente a la adversidad, junto a la capacidad para reconstruirnos saliendo fortalecidos del conflicto. Es lo que caracteriza a la resiliencia. Una actitud vital positiva a pesar de las circunstancias difíciles, que representa el lado positivo de nuestra salud mental.

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