En los pequeños detalles y cuando se está desprevenido es cuando el hombre pone de manifiesto su carácter.
Arthur Schopenhauer
Nuestra personalidad influencia todo lo que nos rodea. Desde los amigos y amigas hasta la opción política que decidas apoyar con tu voto. Es como nuestro ADN psicológico y, aunque se hace difícil predecir formas de actuar o pensar exclusivamente en base a ella, su influencia en nuestro día a día, es indudable.
A pesar de ello, la mayoría de nosotros no somos conscientes de como es nuestra personalidad. Que rasgos la definen o como puede afectar a nuestra forma de movernos en el mundo. Conocerlos nos puede ayudar a entender nuestras fortalezas y debilidades, además de ayudarnos a comprender como nos pueden estar viendo los demás
La psicología moderna parece coincidir en que podemos hablar de cinco grandes rasgos de personalidad, conocido como el modelo de los cinco factores. Todos poseemos un cierto grado de cada uno de ellos.
1. Responsabilidad
La personas con un alto nivel de responsabilidad son eficientes, bien organizadas, de confianza y auto suficientes. Quienes puntúan bajo en este factor pueden ver a estas personas como obsesivas y obstinadas
2. Extraversion
Quienes puntúan alto en este factor obtienen su energía de la actividad social. Son personas habladoras, comunicativas y que se encuentran cómodas destacando. Esto puede que haga que, quien no lo posee, les vea como dominantes o con necesidad de atención continúa.
3. Cordialidad
Estas personas son de confianza, muestran generosidad con los demás y destacan por su actitud prosocial, siendo habitual que estén implicadas en organizaciones benéficas o actividades altruistas, a modo de voluntarios. Otros pueden verlos como ingenuos o conformistas.
4. Abierto a la experiencia
Una gran imaginación y un amplio rango de intereses, de lo más variados, definen a las personas con este rasgo. Son curiosas y creativas, y tienden a huir de las rutinas. Son conocidas por buscar el crecimiento personal a través de nuevas y, a menudo exóticas, experiencias. Quien no lo posee los puede catalogar de impredecibles o dispersos.
5. Neuroticismo
Las personas neuróticas muestran un alto nivel de inestabilidad emocional. Es más probable que sean reactivos y excitable, y experimentan gran intensidad de emociones desagradables como ansiedad e irritabilidad. Estos rasgos pueden hacer que otras personas les vean como inestable e inseguras.
Estos factores de personalidad permanecen estables a lo largo del tiempo. Es muy probable que los rasgos que mostramos a los siete años puedan predecir mucha de nuestra conducta como adultos. Se puede cambiar, por supuesto, pero es necesario conocer como somos, si queremos hacerlo.
Nuestra personalidad, descrita con estos factores, es el punto de partida necesario para conseguirlo y no meternos en aventuras que no hacen más que confundirnos y apartarnos de nuestras verdaderas posibilidades de cambio.