El hombre se convierte en lo que el cree de si mismo. Si yo me mantengo diciéndome a mi mismo que no puedo hacer cierta cosa, es muy probable que termine convirtiéndome en incapaz de hacerlo. De forma contraria, si yo tengo la creencia de que puedo hacerlo, seguramente voy adquirir la capacidad de hacerlo inclusive si yo no pude hacerlo en el principio.
Mahatma Gandhi
El ser humano tiende a recordar lo malo y olvidarse de lo bueno. Es adaptativo. No lo podemos evitar. Aquello que nos hizo daño, se queda más tiempo con nosotros, pensando que recordándolo será una buena manera de anticiparnos si vuelve a ocurrir..
Esto, que puede tener cierta lógica, nos puede llevar a vivir nuestra vida solo evitando lo que nos ha causado dolor. Y olvidando o menospreciando aquello que nos ha hecho dichosos o felices..
Cambiar este patrón de pensamiento exige un duro trabajo. Cuando algo bueno nos ocurre, pensamos que ha podido ser fruto de la casualidad, de la suerte, y en mucha menor medida de lo bien que lo hemos hecho..
La conocida frase de añorar lo que no tenemos y valorar lo que sí, encierra una doble lección. La que puede venir derivada de tener ambición de querer conseguir más cosas, de crecer, en definitiva. Y eso es bueno, siempre que partamos de una apreciación Y cariño hacia nosotros mismos..
La segunda lección es la que puede ser realmente destructiva. Porque nos lleva a pensar que nunca somos suficiente. Que nuestra vida actual, la gente que nos quiere, la gente que queremos, lo que hacemos, no vale la pena. Y que siempre tenemos que estar buscando algo mejor. Esto es peligroso..
Cambiarlo exige conciencia. Exige estar atentos a cómo pensamos, especialmente en los momentos en que somos felices, para vivirlo intensamente. Repasar qué es lo que nos hace dichosos una y otra vez. Hasta que lo fijemos en nuestro cerebro. Hasta que consigamos que tenga, al menos, el mismo valor, Que aquello que consideramos negativo.
Les invito a que lo hagan. A que cierren los ojos y piensen en aquello que les ha hecho feliz hoy, ayer, hace unos días a largo de su vida. Es el principio del entrenamiento de una felicidad sana, y basada en la propia experiencia..