Este refrán español alude a la incapacidad de alguien para ver la verdadera naturaleza de un determinado problema. Pero, de lo que reflexionamos hoy, es nivel experto en este caso. Aquel reservado a quienes crean problemas donde no los hay. A quienes son capaces, de un plumazo, de modificar décadas de logros en derechos sociales.

Hay muchos, lo se. Y, desgraciadamente, no parece una trastorno fácil de resolver. Porque la costumbre de erigirnos en los defensores de otras personas, sin que estas nos lo soliciten, es una epidemia que crece como la mala hierba. Los “es por tu bien” o “lo hemos hecho pensando en lo mejor para ustedes”, es la carta de presentación de medidas como la que hemos leído esta semana: En España se está pensando en solicitar un examen médico, como requisito para que las personas invidentes o hipoacúsicas se puedan casar.

Una barbaridad que, en el mejor de los casos, podría ser susceptible de broma si no fuese por lo irrespetuosa, desconsiderada e incomprensible que resulta. Porque al parecer, proviene de una propuesta de reforma del artículo 56 del Código Civil por la cual las personas con deficiencia sensorial necesitarán un informe médico para poder casarse a partir del 30 de junio de 2017 en virtud de la reforma.

Más allá de las consideraciones legales o éticas de esta medida, el perjuicio que se está causando solo con el hecho de plantearla, a nivel psicológico a estas personas, es inmedible. De un plumazo, se está volviendo a enviar a … ¿el siglo pasado o antes? a colectivos que llevan años consiguiendo, pasito a pasito, el reconocimiento de su papel capacitado en una sociedad democrática y abierta.

Esta medida les devuelve a una zona de dependencia, de personas necesitadas de tutela. Algo totalmente intolerable e incomprensible. Comparable a las peores medidas de regímenes totalitarios y discriminatorios.
Confío en la vuelta atrás de la misma. Pero, no nos despistemos, el daño ya está hecho.

Solo el que alguien se le pase por la cabeza que resultaba necesaria, y que ese alguien además fuese capaz de recorrer todo este camino, nos debe hacer encender todas las alarmas.

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