El asesinato de Romina Celeste fue un crimen terrible. El acusado del mismo se declaró culpable casi cinco años después en el juicio que se celebró en fechas recientes en Las Palmas de Gran Canaria.
La madre de Romina, junto con su familia han tenido que pasar por un terrible calvario que, entre otras cosas, no les permitía cerrar su duelo. Con los periodistas Pedro Machín, Wendy Fuentes y Antonio Herrero, analizamos algunas claves de este terrible asesinato machista.
¿Qué nos ocurre emocionalmente cuando se acercan fechas y aniversarios en una muerte violenta?
Los afectados toman conciencia de su vulnerabilidad ante la vida y la muerte. Las secuelas más habituales girarán entorno a la reexperimentación, hiperactivación y evitación de todos los recuerdos asociados al trauma; la persona se encuentra en alerta necesitando de un tiempo para elaborar e integrar lo sucedido, mientras tanto será normal que presente un malestar psicológico intenso ante determinados estímulos o recuerdos que pueden generar respuestas fisiológicas exageradas; que evite todo aquello que le recuerde los mismos y que haya un aumento de su activación general que repercuta en sus hábitos cotidianos como el descanso o su capacidad de concentración.
Cuando estos síntomas se mantienen más allá del mes desde la vivencia del hecho traumático, podemos empezar a hablar de la posible aparición de un Trastorno por Estrés Postraumático.
¿Es positivo o negativo revivir la muerte de un familiar asesinado?
Cuando se produce una muerte por asesinato, los familiares de la víctima se ven forzados, secuencialmente a vivir diferentes etapas que podemos denominar administrativas.
Desde la investigación, detención del presunto culpable, el esclarecimiento de los hechos ocurridos (con sus diferentes detalles que pueden hacernos vivir vicariamente como se sentía la víctima, y sus implicaciones), reconocimiento del cuerpo (en caso de que este se haya recuperado), pasando por todo el proceso judicial (la prisión provisional del acusado), hasta la celebración del juicio, son etapas que condicionan -y mucho-, como la familia y seres queridos, puedan construir el duelo.
Muchos de los afectados volverán a visualizar escenas en la televisión que reactivarán sus recuerdos traumáticos afectándoles negativamente, sobre todo si la elaboración del trauma no se ha podido realizar correctamente debido a todos los condicionantes anteriores..
¿Por qué es tan importante recuperar el cuerpo del familiar fallecido?
Porque la visión del cadáver implica la toma de conciencia de la realidad de su pérdida y por tanto en muchas ocasiones el inicio de un duelo adecuado. No poder recuperar el cuerpo y por tanto no poder ofrecer a la familia la posibilidad de reconocerlo, pueden en muchos casos potenciar la negación como mecanismo de defensa, no aceptar la realidad de la pérdida, y el desarrollo de un trastorno de estrés posttraumático, que puede devenir en ansiedad y depresión.
¿Cómo se debe tratar estos sucesos por parte de los medios?
Nuestro país no parece tener muy en consideración la repercusión que sobre las víctimas puede tener este hecho. Es inevitable no recordarlo públicamente pero hay muchas formas de hacerlo sin tener que volver a utilizar las imágenes más dantescas o ahondar en la herida de la víctima buscando el morbo para generar audiencia. Este es un tema que considero se necesitaría trabajar con los medios para evitar las repercusiones negativas propias de la victimización secundaria.
Sin embargo si los medios se centraran en mostrar el testimonio de los afectados que han sabido superar el trauma inicial, desde el respeto a cada uno de ellos, los resultados de estas entrevistas si podrían convertirse en una muestra de la superación personal del ser humano y en una referencia positiva y esperanzadora para aquellos que todavía no han sido capaces de elaborar sanamente sus pérdidas o se encuentran en el proceso doloroso de sus duelos complicados.
El respeto a las víctimas siempre tiene que estar por encima de todo lo demás.