EL PESCADOR ERMITAÑO

Un viejo pescador vivía completamente solo en una playa alejada del pueblo. Harto de discusiones, conflictos y peleas, llevaba años sin relacionarse con nadie. Se había convertido en un hombre frío y distante, que pasaba los días leyendo y pescando. Un día salió a navegar con su pequeña barca en alta mar. De pronto apareció un bote que chocó frontalmente contra el del pescador. Este se pegó tal susto que dio un salto y cayó directamente al agua.

fisherman-239487_1280

Mientras nadaba para volver a subir a su barca, empezó a maldecir al tripulante del otro bote. “¡Pero ¿cómo has podido chocar contra mí?! ¡Con lo grande que es el mar! ¡Maldito seas! ¡Ya verás como te coja!”. Al conseguir sentarse y recuperar la compostura se dio cuenta de que allí no había nadie más. Era un bote a la deriva. El viejo pescador estaba empapado, rabioso y sin nadie a quien culpar. De pronto, por primera vez en mucho tiempo, emitió una enorme carcajada. Algo en su interior hizo clic. Y esa misma tarde se dejó caer por el bar del pueblo.

Gracias Luis Pérez Balboa

Compártelo

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *