Creo que un héroe es quien entiende la responsabilidad que conlleva su libertad.
Bob Dylan
¿Has oído hablar del Efecto del Observador? Este curioso (e incomprensible) fenómeno psicológico se produce al disminuir nuestra intención de ayudar cuando hay mucha gente. En muchos casos, simplemente asumimos que alguien lo hará, ya que muchos están en la misma posición que nosotros.
Esta conducta humana puede resultar fatídica, especialmente cuando se requiere una acción rápida para evitar una situación de vida o muerte. Es un efecto parecido a lo que ocurre con la difusión de la responsabilidad, otro fenómeno que implica como perdemos nuestra identidad en la multitud. Así podemos ver a personas comportarse como energúmenos viendo un partido de fútbol. Lo que parece ocurrir en ambos casos es que se diluye nuestra forma de ser individual. En cierta manera, nos aborregamos.
Afortunadamente esto se puede cambiar y conseguir salir de esta trampa de inacción. Requiere un esfuerzo individual y comunitario. Empezando por resaltar los valores individuales, la importancia de las convicciones, de nuestra propia moral. Es un trabajo que, por supuesto, debe empezar en la familia y continuar en todos los ámbitos de la sociedad.
Y el trabajo no solo tiene que quedar ahí. Se trata de que nuestro propio cambio nos sirva como motor para provocar el cambio de los otros. Todos poseemos la capacidad de ponernos en el lugar de los demás y actuar. Si a esto le añadimos un conocimiento adecuado de nuestras habilidades podremos dar la vuelta a una situación que esté afectada por este efecto del observador.
Como recoge un interesante proyecto que se desarrolla en Estados Unidos “con práctica, los estudiantes pueden aprender a fortalecer su instinto natural de ayuda y evitar este efecto de manos caídas” en situaciones de emergencia.
Pero esto no se queda solamente en los jóvenes. Se aplica a toda la sociedad. Solamente viendo como otras personas toman la iniciativa en situaciones comprometidas y siendo consciente de nuestras capacidades para intervenir, podremos cambiar nuestro punto de vista.
Pasaremos de observador a héroe.